Interesante, el paralelismo entre el Cristo trinitario y el Adán Kedmon de la Cábala. Parecen dos formas de abordar la misma realidad.
En especial, llama la atención la semejanza entre el tratamiento que hace de lo crístico el Curso de Milagros y la propuesta cabalística de Halevi.
En ambos casos, es Dios buscando reconocer el rostro de su Verbo, en la tradición cristiana, o su reflejo, en la hebraica.