¿A dónde quieres que vaya?
¿Qué quieres que haga?
¿Qué quieres que diga, y a quién?
(Un curso de milagros)
El futuro ha perdido su forma por entero. En muchos niveles y aspectos del arco de mi vida, sencillamente no sé lo que quiero, debo o puedo hacer.
No sé, y punto.
Lo nuevo es que hay bastante paz y no hay demasiado miedo.
Pregunto, pues, por la acción (o no acción) justa al Dios que me conforma. Pregunto a mi profundidad: ¿Qué quieres que haga?
Y espero la respuesta.