Soy
una mujer
dura.
Soy
(también)
una mujer dura,
como la tierra,
que necesita
de su dureza
para dar sustento.
Soy
una mujer
(también)
de tierra y piedra,
de mineral
y roca
y lava.
Quemo
(también)
con lo que digo,
con lo que hago,
con lo que soy.
Amo
(también)
de una manera dura,
apasionadamente dura,
plena
de la plena dulzura
de la dureza.
A.S.