"No basta abrir la ventana
para ver los campos y el río.
No es suficiente no ser ciego
para ver los árboles y las flores.
También es necesario no tener filosofía.
Con filosofía no hay árboles: hay sólo ideas.
Hay sólo una ventana cerrada, y todo el mundo afuera;
y un sueño de lo que se podría ver si la ventana se abriera,
que nunca es lo que se ve cuando se abre la ventana."
"Pero no siempre quiero ser feliz.
Hace falta ser infeliz de vez en cuando
para poder ser natural…
No todo es días de sol,
y la lluvia, cuando escasea , se pide.
Por eso tomo la infelicidad y la felicidad
con naturalidad, como quien no se extraña
de que haya montañas y llanuras
y de que haya rocas y hierba…"
(Pessoa)